miércoles, 27 de abril de 2016

BBG Semana 19 AKA Trucos para comer fuera de casa

Es lo que tiene la llegada del buen tiempo, que empiezan los viajecitos, las escapadas, y también las visitas de familiares.
Este finde estuvo la familia del rugbier en casa, y aprovechamos para hacer una escapadita a una ciudad cercana, Würzburg, muy bonita y muy recomendable.
Pero claro, con las visitas, por mucho empeño que yo le ponga, vienen las comidas fuera de casa, y se me hace complicado cuadrarlas para no pasarme con las calorías hasta la estratosfera.
Está claro que comiendo fuera de casa es fácil pasarse, empezando por que aquí en Alemania son muy dados a cocinar con manteca o mantequilla y el aceite de oliva ni lo huelen, y claro, eso hace que la comida sea mucho más grasa, que la grasa no sea tan buena, y acabo con digestiones un poco peores.
Pero con todas, tengo mis truquitos para comer fuera de casa:
  1. Planear lo que se va a comer: Busqué los restaurantes donde ibamos a comer, y de antes ya seleccioné lo que iba a pedir, y lo apunté en mi registro en Myfitnesspal. Es más fácil mantener una promesa ya hecha, que decidir en el restaurante pedir una ensalada, con el hambre rugiendo y los suegros pidiendo filetones.
  2. Limitar el alcohol: Me planteé no pedir alcohol durante las comidas y dejarlo sólo para las cenas. Cuajó a la mitad, pero bueno, una cerveza menos siempre es una cerveza menos.
  3. No repetir: En el desayuno del hotel, de bufet, eché un buen vistazo a la comida, llené el plato de cosas saludables (fruta, yogur, cereales... nada de bollería o queso), y no me levanté con el resto para repetir. Con el vino en las cenas lo mismo, me tomaba mi copa, pero no dejaba que me echaran más.
  4. Mucha agua: con una botella en el coche o en el bolso a la fuerza acabo bebiendo mucha agua, y es menos sensación de hambre que llevo a las comidas.
  5. Siempre verdura: Me fuerzo a pedir platos en los que hay verdura, ya sea principal o de acompañamiento. Es espacio que le quito a patatas fritas y similares, y al pedir la verdura automáticamente descarto los platos más pesados y grasientos, que a veces no llevan ni perejil para decorar.
Desayuno del hotel: yogur con cereales, avena y un poco de mermelada, muy parecido a lo que me hubiera preparado en csaa.

Aun con todo comí mucho más el fin de semana que de normal, y no solamente fue más, si no además menos sano. Pero no pasa nada, fueron sólo dos días, y si el resto del tiempo se hace bien la dieta, comiendo bien, comiendo de todo y sin pasarse, ocurre lo que me ha pasado esta semana, que a pesar de los pequeños excesos he adelgazado otro poco ☺

Y vosotros, qué trucos usáis cuando coméis fuera de casa?

martes, 26 de abril de 2016

Reflexión Yogui: Creo en mí, soy capaz de lo que me proponga

Para la reflexión del reto #mividayogui2016 de la semana pasada he estado dándole vueltas a todo lo que he conseguido en el último año, desde que empecé a tomarme más en serio mi salud y tomé la decisión de cambiar mis hábitos a más saludables.
 
MUSCULACIÓN
 
Empecé volviendo al gimnasio, con el libro de Intensidad MAX en la mano. Apenas había usado las máquinas del gimnasio antes, y nunca había tocado una pesa. Y aun así, fui capaz de seguir durante varias semanas el plan, con pesas incluidas.
 
5KM
 
Enseguida pasé a correr en la cinta del gimnasio para complementar con los días de pesas. Me daba cosa hacer sólo pesas (ya que iba al gimnasio quería aprovechar el tiempo), no me apetecían las clases y la elíptica ya la tenía en casa, así que probé la cinta de correr. El primer día aguanté unos muy largos 10 minutos, y aunque era poco, me puse metas pequeñas y poco a poco las fui cumpliendo (llegar al 1,5km, hacer 15 minutos, llegar a 2km,...).
Creí en mí y me apunté unas semanas después a mi primera carrera popular de 5km.
 
BBG
 
Después de un verano un poco parado, retomé el deporte después del lío de la boda, aprovechando el "trabajo nuevo, vida nueva". Descubrí a través de mi hermana e Instagram a Kayla Itsines y su BBG, y aunque la primera semana fue un infierno de agujetas, creí en mí, en que era capaz de superar las 12 semanas. Y ahora ya voy por la 19!
 
10KM
 
A finales del año hice la mayor apuesta del año, desde el punto de vista deportivo: correr los 10km de la San Silvestre en Madrid. Fui capaz! Y fue una sensación genial.
 
DIETA
 
Este año lo comencé poniéndome en serio a dieta, para complementar con el deporte. Durante toda mi vida había empezado dietas para abandonarlas a la semana o menos. Pero esta vez es distinto: me dije a mí misma, si eres capaz de correr 10km y de tener la fuerza de voluntad de hacer deporte 3-4 días a la semana, entonces también tienes la fuerza para controlar lo que comes. No he dejado de comer nada, simplemente he aprendido que cada cosa tiene su medida justa.
Creí en mí, y ya he perdido casi 6 kilos!
 
YOGA
 
A la par que la dieta, llegó a mi vida el Yoga. El descubrimiento más impresionante aquí ha sido darme cuenta de que no tengo por qué aguantar dolor de hombros y lumbares por estar sentada todo el día. Soy capaz, a través del Yoga, de corregir mi postura y equilibrar mi espalda con una sesión al día o cada dos. Mi espalda es más fuerte y ahora practico posturas, como el puente, que antes con mis lumbares ni me hubiera planteado.
 
En este tiempo he aprendido que creyendo en mí misma soy capaz de muchísimas cosas. He roto los límites que me había impuesto, me he dado cuenta de que puedo con mucho más de lo que pensaba, y que además lo puedo disfrutar. Todo supone un esfuerzo, claro, pero en ningún momento he traspasado mis fuerzas físicas o mentales.
 
Los logros son inmensos por que han surgido de un cambio de mentalidad. Siempre he querido estar más delgada, más guapa, mas sana, pero no hacía nada para ello. Ahora pienso distinto, ahora entiendo que si quiero conseguir una vida más saludable y estar más sana (que no más delgada) tengo que hacer algo, tengo que ser yo la que cree el cambio. Tengo que creer en mí misma, en que puedo. Lo hice, lo hago, creo en mí misma. Y soy capaz de muchas más cosas de las que pensaba!
 
 
Y vosotros, qué habéis conseguido en el último año que creíais imposible?

miércoles, 20 de abril de 2016

Menús Semanales: Quinoa!

Voy a dejar de contar cada semana los menús que me preparo por que de tanto en tanto repito, como el caso de estas últimas tres semanas, y voy a ponerlos por aquí cuando descubra algun ingrediente nuevo genial o una receta que merezca ser compartida.
 
Y por eso aparezco por aquí con mi último descubrimiento, la QUINOA!!!
 
 
La primera (y única vez de paso) que tomé quinoa fue hace un par de meses en la cantina de la empresa, cuando aún no me traía la comida al trabajo. Ya me sonaba y pillé el plato por curiosidad por ver a qué sabía, y la verdad es que me gustó un montón, así que hace unas semanas compré un paquete de un kilo y ahora por fin me he animado a probarla.
 

La de la cantina del trabajo: quinoa roja con pisto y queso feta

Preparé por un lado la quinoa y por otro lado una mezcla de verduras tipo pisto (calabacín, pimientos, cebolla y brokoli) y un poco de pollo al vapor. Todo luego mezcladito, y esta es la pinta que tiene.
No sé si parecerá rico o no... pero lo está, muchísimo!
El sabor no es muy distinto a un cuscus o a un arroz integral, quiero decir que es bastante neutro. La gran diferencia está en la textura, no es nada seco y la verdad es que queda muy sabroso. Llena un montón y así mezclado con verdurita y algo de proteina está riquísimo.
 

Mi receta: quinoa blanca con verduras y pollo

Además del sabor, es un ingrediente con muchísimos beneficios para la salud, aquí os los dejo. 
 
Lo dicho, muy muy recomendable. La única pega que le veo es el precio, el paquete que compré me costó 7 eurazos el medio kilo (me equivoqué antes, puse kilo y es medio). Espero encontrarlo más barato en otro super, por que tengo intención de probar muchas más recetas!

martes, 19 de abril de 2016

BBG Semana 18 AKA Liberándome

Si señores, estoy muy feliz por que la semana pasada - sobretodo durante el fin de semana - recuperé el ritmo que llevaba las anteriores, y también las ganas de hacer ejercicio y moverme, de machacarme con la BBG y acabar sudando y pidiendo tiempo muerto.
 
De paso he de decir que el parón de metabolismo que tuve hace cosa de un mes está totalmente superado, por lo que además de sentirme mejor por el ejercicio y la dieta, la báscula también responde bien.
 
Por otro lado, no sé si será por la primavera o esta nueva yo dispuesta a liberarse de todo lo que le sobra, me dio un siroco el sábado y me puse como loca a recoger la casa. Llevaba meses ofuscada en que daba igual lo que recogieramos la casa, seguía desordenada. No era desorden, más bien era superávit de cosas. En la cocina, la nevera, el salón, la habitación de invitados, el armario de ropa, la librería, el armarito del baño... todo estaba abarrotado de cosas que se van guardando sin pensar y quedan olvidadas durante meses e incluso años.
Me tiré el sábado entero en casa, sola - aprovechando que el rugbier se iba de partido a otra ciudad -, me puse musicota y vacié cajón por cajón toda la casa.
Está claro que esto hay que hacerlo con mucha decisión y sin pena ni nostalgia ninguna, por que entonces no se tira nada de nada. Todo tiene un recuerdo a una situación o a una persona, y si el recuerdo es bueno, es dificil librarse de ello. Pero hay que entender que el recuerdo seguirá ahí, sin importar si seguimos llevando esa camiseta llena de agujeros o no, y que las cosas que ya no usamos, hay que dejarlas ir.
 
Acabé el día con 5 bolsas de basura, 2 de papel para reciclar, 8 de ropa y 2 de sábanas/toallas para donar.
Sé que suena a mucho - yo misma me sorprendí de la cantidad de bolsas que había - pero a esto he de decir que no me caracterizo por ir mucho de compras. En realidad no me gusta nada, así que lo que he almacenado no ha sido por un consumismo compulsivo, si no por uno más bien moderado.
 
Me sentí genial. Liberé nuestro piso, mi armario y sobretodo a mí misma de todo lo que sobraba. No he tirado nada que realmente tuviera un valor sentimental (si es que hay algo que lo tenga a parte de las fotos y los recuerdos) y el pisito está más vacío, más ligero, más ordenado.
 
Aun no he llegado a este nivel, pero ahora estoy un poquito más cerca :)
 
 
Y vosotros, también hacéis limpieza de primavera?

Reflexión Yogui: Escucho a mi cuerpo y aprendo

Durante toda la vida he sido poco miedica (de hecho eso empezó en la universidad, hasta ese momento me creía invencible). Esto, como es de esperar, llevaba a mi madre por el camino de la amargura, pues su hija mayor no tenía ningún problema en subirse a árboles, saltar donde no debía, hacer malabarismos, correr sin mirar y en general prestar poca atención a los posibles peligros que pudiera haber alrededor. No sólo no hacía caso del peligro, si no que muchas veces lo creaba.

Conclusión? Nariz torcida desde los 6 años, mil esguinces en ambos tobillos, collarín en un viaje de esquí (y seguí esquiando) y varias tentativas de romperme las cejas (aqui por suerte, sin éxito). He vuelto a casa del cole con vendas muchas veces, tantas que el conserje que nos llevaba a urgencias ya se conocía mi cara.
 
Con los años he ido cogiendo miedo, o mejor dicho, he aprendido que la prudencia también es valiosa. Ahora escucho a mi cuerpo, y aunque me sigo lanzando a probar nuevas cosas, ahora ya no lo hago a lo loco, si no siendo consciente de qué limites tiene mi físico, cuales puedo intentar pasar, y cuales es mejor dejar estar.

He aprendido que tengo facilidad para torcerme los tobillos y hacerme daño (más o menos cada dos años me toca llevar tobillera unas semanas) así que hago caso a mi cuerpo y evito los  ejercicios con saltos y muchos brincos.

He escuchado también a mi espalda, que desde hace varios años tiene que aguantar más peso del que le corresponde, y está durante horas y horas sentada sin moverse, aprendo y le regalo sesiones de pilates o yoga para compensar.

He escuchado a mis rodillas, que también soportan como campeonas mis kilos de más, y les he  comprado unas zapatillas de correr en condiciones, con plantillas para hacer la pisada más cómoda.
 
Las sesiones de yoga son un micrófono para mi cuerpo, a través de ellas doy voz a mis músculos y mis huesos, que me dicen donde les duele, donde necesitan estiramientos, donde se sienten cómodos.
 
Hasta aquí mi reflexión de esta semana para el reto de #mividayogui2016, y vosotros, escucháis y aprendéis de vuestro cuerpo? De qué manera?

miércoles, 13 de abril de 2016

BBG Semana 17 AKA Vagancia Total

Debería ponerme en plan Juego de Tronos y machacarme un poco con un Shame! Shame! Shame! por que vergüenza debería darme la semana de vagancia total que me he pegado.
 
 
Pero la verdad es que no tengo ningún remordimiento, ni me da nada de vergüenza!
Vale, me salté la BBG a la torera.
Vale, a Fatburner no fui con la excusa de "si no, no me da tiempo a hacer la cena".
Vale, se me pegó el culo al sofá.
 
Pero no me da ninguna pena.
 
A veces simplemente hay que escuchar al cuerpo y darle un poco de descanso. No fue una semana tirada a la basura del todo, controlé muy bien la dieta sin muchos excesos, y gracias al reto #mividayogui2016 saqué todos los días un ratito para hacer yoga y estirarme bien.
No quiero hacer deporte por obligación. Está claro que no siempre tengo ganas y tiro de fuerza de voluntad (también conocida por mensajes de motivación en instagram y mirar mis fotos de antes y después) y creatividad para ponerme a ello, pero siempre acaba siendo algo que me apetece hacer, que disfruto, y al terminar tengo una sonrisa en la cara. Pero cada mes y pico necesito un poco de pausa, dar un paso atrás, mirar todo lo que conseguido, y coger carrerilla para la siguiente etapa.
 
Y en esas estoy, hoy empiezo la semana 18, a tope!!
 
 

lunes, 11 de abril de 2016

Reflexion Yogui: Me reconozco y acepto

Me reconozco en una persona de caderas anchas, y acepto que este es mi cuerpo.

Me reconozco en alguien que disfruta de comer, y acepto que puedo disfrutar sin comprometer mi salud.

Me reconozco en una persona en ocasiones ansiosa con la comida, y acepto que no siempre puedo controlarlo.

Me reconozco en alguien perezoso, y acepto que necesito fuerza de voluntad para levantar el culo del sofá.

Me reconozco en una persona desordenada, y acepto que mi casa nunca saldrá en una revista.

Me reconozco en alguien social, y acepto que me gusta estar rodeada de gente.

Me reconozco también en una persona en ocasiones solitaria, y acepto que a veces prefiera disfrutar de mi soledad.

Me reconozco en una persona un poco soberbia, y acepto que a veces me cuesta aceptar consejos.

Me reconozco en una persona distraida, y acepto que necesito listas y calendarios que me recuerden qué hacer y qué día es.


Y vosotros, os reconocéis y aceptáis?

Reto #mividayogui2016

Confieso que me gustan los retos. Me he puesto un par a mí misma desde que empecé el blog y el cambio de vida, en parte para afianzar nuevos hábitos, en parte para mantenerme motivada. Igual que la competición nunca me ha atraido, los retos a mí misma sí que me gustan.
Me he planteado uya varios: reto de agua, reto de ensalada, reto de 21 días.... en todos he aprendido algo y me he quedado con nuevos buenos hábitos.
 
Ahora estoy en algo distintio, un reto propuesto por otra persona, pero igualmente un reto para mí misma, sin competir con nadie más.
Blanca es blogger de Women´s Health: Diario de una Yogui, además de ser muy activa en Instagram (@blanca_bz), donde la conocí.
Me gusta su visión del yoga, porque lo normal es encontrar en Instagram un montón de fotos de mujeres (también hombres, pero sobretodo son mujeres) practicando posturas de yoga con un fin estético, y Blanca, en cambio, muestra un yoga más cercano a la calma, introspección y amor al propio cuerpo.
En otras cuentas se muestran cuerpos esbeltos en posturas imposibles. Son fotos bellas, no voy a negarlo, y yo sigo a unas cuantas cuentas de este estilo. Pero no es lo que busco de yoga, no busco un cuerpo de modelo y unas posturas bonitas. Lo que busco es calma, flexibilidad, meditación, estirar y formar mis músculos, mejorar mi postura, conocerme mejor. Las posturas las hago no por su belleza, si no por su utilidad. Y todo esto es lo que me transmite Blanca en Instagram y su blog.
 
Pues bien, ella ha propuesto para Abril 20 posturas de Yoga para retar a todo aquel que quiera unirse.
 
 
Me gusta por que propone, además de las posturas explicadas paso a paso para poder practicarlas, una reflexión cada semana.
La pasada, la primera semana, la reflexión era la siguiente: Me reconozco y acepto. Pero esta es otra historia, y será contada en otra ocasión (en el siguiente post, vaya)
 
Y a vosotros, os gustan este tipo de retos?

miércoles, 6 de abril de 2016

BBG Semana 16 AKA Descolocada

Madre mía, vaya dos semanas llevo!
Dos fines de semana seguidos de viaje consiguen que me descoloque totalmente el plan, por lo que me doy cuenta de que mucha parte del ejercicio lo hago durante el finde.
 
Voy a recapitular un poco las últimas dos semanas, para volver a colocarme!
 
La Semana Santa fue muy guay, estuve con el rugbier de turisteo por el norte de Alemania, para descubrir que en el sur vivimos de manera muy distinta, y sobretodo, con más sol y menos lluvia!
Nos gustó mucho el viaje, nos lo pasamos genial, pero volvimos muy felices a casa para olvidarnos de la lluvia horizontal y el viento huracanado de las ciudades hanseáticas.
Como buenas minivacaciones, no faltaron los excesos: cerveza, vino, bollos, kebab,... todo lo que en mi rutina normal ya apenas toco.
Tampoco me pasé mucho, y me ha servido para darme cuenta de que se puede disfrutar de un vino o una cerveza sin pasarse ni sentirse mal. También, para ver que lo que hace medio año me parecía un consumo normal, ahora me parece pasarme tres pueblos. Lo cual es bueno, ahora mismo más de dos cervezas no se me ocurre pedirme, y antes eso sólo era el principio!
 
Después de una semana corta pero intensa en el trabajo, con mucho más lío de lo normal, me volví a subir a un avión para visitar a mi familia en España. Esta vez, sin embargo, fui muy, muy buena, y disfruté de la misma manera que siempre de los eventos familiares sin pasarme.
El secreto? Quitarme todo lo que no me aportara nada. Comí todo lo que me apetecía, pero poco. Escuché a mi estómago y comí sólo lo que me aportaba algo, me nutría, además de hacerme disfrutar, y sobretodo, dejé de comer cuando ya no tenía hambre.
En concreto quiero decir que no tomé pan, para postre tomé un té en vez de café con bombones y rosquillas, vino fue sólo una copa pequeña sin rellenar, y las patatas fritas se las dejé todas a mi madre.
Comí, comí bien, pero no me pasé, y eso lo agradezco yo, lo agradece mi cuerpo, y también la balanza.

De tal manera que lo que engordé en semana santa, lo equilibré después, y aunque no he bajado de peso en dos semanas, tampoco he subido. Y lo más importante, me he dado cuenta de que ya no tengo ansiedad por comer.
 
No sé si será el ejercicio, correr, BBG, el cambio de trabajo, el rugbier, la dieta o yoga... o la combinación de todo esto. Lo que sé es que desde que decidí cambiar mi vida y tomar las riendas de mi salud, soy mucho más feliz. Me hace feliz saber que soy yo la que decide qué comer, qué ejercicio hacer, cómo moverme, y poco a poco, con qué vestirme.
 
Así que aunque estas semanas he estado un poco descolocada, en realidad ahora mismo estoy más equilibrada de lo que he estado nunca.
 
Y vosotros, habéis notado que con una vida más saludable os sentís mejor?
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...